Empiezan a desconfiar de ti porque la curiosidad se apoderó de tu
cuerpo.
Una droga fue tu
compañía y ya no quieres seguir porque quieres probar algo que tenga un efecto más
duradero y "loco", ese algo que te ayude a olvidar. Sabes que esto te
puede dañar, empeorar, destruir, pero no importa y vas por más, continuando la
vida con la falsa necesidad de acabar la agonía.
Sigues haciendo daño a tu familia y aunque te sientes culpable, no
lo puedes parar, sientes que has tocado fondo, a veces intentas hacer un alto
en el camino, pero es demasiado tarde y continúas. Luego llega el cercano
saludo de la muerte y quieres devolver el tiempo, pero no puedes y tienes miedo
porque sabes que defraudaste a muchos, lo único que finalmente harás, es tratar de olvidar y morir.